La huelga de correos ha sido un éxito cifrándose su participación en un 80% de los trabajadores en respuesta a:
- La paralización de la negociación del Convenio Colectivo para el personal laboral y el Acuerdo General para los funcionarios.
- La pretensión de Correos y SEPI de aplicar “manu militari” las pautas que, para la negociación colectiva en 2014, aprobó el pasado 29 de mayo la Comisión Delegada para Asuntos Económicos para las empresas públicas que, de aplicarse, supondrían la pérdida de los derechos laborales vigentes para los trabajadores, así como el desmantelamiento del actual marco de relaciones laborales (dentro del cual figura la ultraactividad de los Convenios) que garantiza el derecho a la negociación colectiva.
- La inclusión en la Ley de Presupuestos del Estado de elementos limitativos que impiden la mejora salarial y de la consolidación de empleo.
A tal efecto, los Sindicatos firmantes coinciden en que, por encima de cualquier diferencia sobre la forma de abordar la defensa de los intereses de los trabajadores, resulta vital anteponer la necesidad de armonizar las distintas actuaciones previstas para dar mayor fuerza a la movilización y tener más capacidad para hacer frente a la situación de agresión sin precedentes que afecta a los trabajadores de Correos.