El día 6 de febrero, la Comunidad de Madrid tiene un nuevo acto de entrega de distinciones a sus empleados y empleadas por méritos al servicio público, desde que el Gobierno creara este reconocimiento en junio de 2014.

Precisamente en junio de 2014, cuando este Gobierno tuvo la idea de reconocer nuestro mérito profesional, a los empleados y empleadas públicas ya nos habían quitado la paga extra, nos habían aumentado la jornada diaria, nos habían bajado el sueldo, habíamos perdido la acción social, nos habían quitado días de vacaciones y eliminado los días canosos, y los servicios públicos habían experimentados recortes que dañaban seriamente la calidad de su prestación y, en algunos casos tan sensibles como nuestra sanidad pública, habían sufrido intentos de privatización que finalmente no consiguieron llevar a cabo.

Cuantos más años se cumplen trabajando para la administración, lo que se espera es que se nos reconozca el empeño valorando nuestra experiencia y conocimientos, que en muchas ocasiones son ninguneados frente al enchufismo que impregna las direcciones de la administración. Lo que esperamos cuando llevamos muchos años trabajando es que se nos ofrezcan oportunidades de promocionar y tener una carrera profesional, absolutamente inexistente en la Comunidad de Madrid. Cuando llevamos muchos años de servicio, lo normal es que ya tengamos cargas familiares y no entendemos por qué nuestra administración nos hace cada vez más difícil conciliar, ya sea haciéndonos recuperar el acompañamiento al médico, limitando nuestros permisos, aumentando nuestra jornada, o robándonos los días canosos.

Estas insignias que nuestro Presidente del Gobierno, Ignacio González, entrega hoy, no traen compensación económica o en días, como hacen otras administraciones, ni nos devuelven ninguno de los derechos usurpados en los últimos tiempos. Parece que estas insignias para lo único que sirven es para darse publicidad a ellos mismos, autobombo, fotografía en algún medio de comunicación.

Señor Ignacio González, los empleados y empleadas públicas a los que usted distingue hoy, están esperando que aproveche usted la oportunidad que le brinda esta entrega de medallas, para anunciarnos que nos devuelve nuestros días adicionales de descanso por servicios prestados, los “canosos”. ¿O acaso no los merecemos?