Por la derogación de la LOMCE, la reversión de los recortes y la retirada de las reválidas
El próximo miércoles hay huelga de Enseñanza, a este paro está convocado todo el personal docente y educadores infantiles de la administración educativa de la Comunidad de Madrid, centros públicos y concertados, el personal docente y educadores de todos los centros educativos de titularidad privada y al personal docente y educadores de empresas educativas de gestión indirecta. Además ese mismo día hay convocada una manifestación a las 18.00h con el recorrido Neptuno-Sevilla.
No vamos a extendernos más sobre la LOMCE ni sobre los recortes, frente a ambos nos hemos manifestado y opuesto de varias maneras en los últimos años la mayoría de la comunidad educativa. Vamos a profundizar en el tercer elemento por el que nos manifestamos y apoyamos esta huelga: la retirada de las reválidas.
Las razones para oponerse a ellas:
- Son un modelo pedagógico desfasado. Basado en una sucesión continua de exámenes configurados como barreras que pretenden impedir a gran parte del alumnado ejercer su derecho a la educación. Los alumnos que no superen las reválidas, aunque tengan todas las enseñanzas superadas, quedarán fuera del sistema educativo, su futuro académico y laboral se verá gravemente afectado
- Cuestionan y deslegitiman el trabajo del docente. Ponen en duda la evaluación continua que el docente realiza y su conocimiento del alumnado con el que trabajan. Su trabajo pasa a ser juzgado por los resultados del alumnado en una única prueba. Además, hacen emplear un tiempo valioso en su preparación obligando a desvirtuar los objetivos primordiales de la educación dejando de lado el desarrollo de competencias esenciales para centrarse en la consecución de resultados en un examen escrito que sólo puede ser un reflejo parcial de la educación del alumno o alumna. Además estas pruebas son realizadas por personas externas, que en absoluto conocen las características del alumnado al que evalúan.
- Son precarias y sin tiempo de preparación. Ni tan siquiera han sido desarrolladas a tiempo para que el alumnado sepa de qué se examinará, ni para que el profesorado sepa cómo ayudarle. Son una auténtica chapuza legislativa que genera indefensión e inseguridad.