Más de 20.000 alumnos se han quedado sin plaza de Formación Profesional de grado superior en centros sostenidos con fondos públicos en Madrid Capital
Un estudio realizado por UGT relativo al alumnado excluido en el proceso de admisión de alumnos de Formación Profesional de Grado Superior en Madrid Capital, pone de manifiesto la necesidad de aumentar la oferta de este tipo de enseñanzas y mejorar la orientación profesional de la misma que, a nuestro juicio, exige una atención más personalizada que la que se proporciona a través de la página web, como UGT viene demandando hace años.
Esta situación ha provocado que UGT solicitara la apertura de nuevos grupos durante el presente curso escolar, implementando soluciones como incrementar grupos vespertinos y a distancia, aunque sea, con carácter excepcional y fuera de los plazos establecidos, acompañado por la posibilidad de obtener cualificaciones profesionales ligadas a las profesiones con más demanda, especialmente en las familias profesionales más solicitadas, como son Sanidad y Servicios a la Comunidad.
El proceso de admisión en enseñanzas de Formación Profesional, para el presente curso 2020/21, ha deparado una ingrata sorpresa: el aumento extraordinario de solicitudes, para las que no había oferta prevista, oferta que siempre ha sido inferior a la demanda en nuestra Comunidad.
Con los datos extraidos de Grado Superior en Madrid Capital y otros de carácter parcial, UGT ha calculado que más de 40.000 solicitantes han quedado excluidos en toda la Comunidad de Madrid y, por tanto, no han obtenido plaza en centros sostenidos con fondos públicos, de los que más de un 90% son centros públicos y el resto privados con enseñanzas conveniadas. Hay que tener en cuenta que no ha sido posible extraer datos totales de las Direcciones de Área Territorial Madrid Norte, Sur, Este y Oeste, que aglutinan el 60% de los centros con enseñanzas de Formación Profesional, ni tampoco totales de Ciclos Formativos de Grado Medio por lo que el cálculo que hemos realizado puede quedar por debajo del real.
Otro dato a tener en cuenta es el espectacular aumento de solicitudes en determinadas familias profesionales y, muy especialmente, en la de Sanidad y Servicios a la Comunidad. En la primera de ellas, se han llegado a quedar sin plaza más de 800 solicitantes por centro. Entre los ciclos más demandados podemos citar los de Anatomía Patológica y Citodiagnóstico o el de Laboratorio Clínico y Biomédico. Ello, sin duda, puede deberse a varios factores. Sin duda, la situación provocada por el covid-19 ha jugado un papel importante en esta elección: por un lado, ha puesto en evidencia la necesidad de sanitarios, en sus múltiples facetas y, por otro lado, la pérdida de puestos de trabajo ha podido provocar el interés de una parte de la ciudadanía madrileña por formarse en aquellas profesiones cuya necesidad de mano de obra puede facilitar, a su juicio, la obtención de un puesto de trabajo.
No obstante, tras el período ordinario de matrículación, el 7 de octubre, la Consejería de Educación y Juventud publicó el listado de vacantes de Grado Superior sin cubrir en centros sostenidos con fondos públicos, que ascendían a 2.080 plazas, todas ellas en enseñanzas que no habían sido demandadas por los solicitantes, como Mantenimiento Electrónico, Automoción, Desarrollo de aplicaciones multiplataforma, Desarrollo de aplicaciones web o Química y salud ambiental, por ejemplo. La falta de demanda de estas y otras profesiones tienen varias explicaciones: la localidad donde se encuentra ubicado el centro que las oferta o la falta de una orientación profesional eficaz que permita al potencial alumnado conocer las ventajas o empleabilidad de determinadas profesiones, como las citadas, pueden ser alguna de las causas.
La excepcional situación que estamos viviendo exige soluciones excepcionales. A juicio de UGT, el paro, los ERTES, la necesidad de nuevos perfiles profesionales y de aumento de recursos humanos en los mismos, exige actuaciones novedosas e inversión suficiente. Los madrileños quieren y necesitan formarse, como ha evidenciado este proceso de admisión, el Gobierno regional debe hacerlo posible.