Desde que CCOO, UGT, CSI·F y Sindicato Libre conformáramos la unidad de acción, Correos está viviendo uno de los mayores procesos de movilización de su historia reciente. A la huelga general estatal y la multitudinaria manifestación celebrada en Madrid del 27-N, se han sumado los paros parciales realizados -el 30 de abril y los días 14 (13 en Madrid) y 21 de mayo– y huelgas generales durante los días durante los días 4, 15 (14 en Madrid), y 22 de mayo con un seguimiento masivo por parte de los trabajadores/as.
Recordamos que este proceso de movilización es respuesta a uno de los mayores recortes de la historia postal: en empleo (15.500 menos en cinco años y 11.000 en los tres últimos), en salario (cinco años de congelación salarial) y en derechos. Y en respuesta al bloqueo del Convenio Colectivo y Acuerdo General.
Un proceso de movilización que está teniendo consecuencias directas y resultados positivos en la propia negociación (activación de las mesas y retirada de un paquete de medidas agresivas iniciales de la empresa) y también en la posición del Gobierno, que, en comparecencia del Ministro de Hacienda en el Parlamento y posterior enmienda del PP en el Parlamento, ha aceptado explícitamente la consolidación de empleo en Correos como una tarea a desarrollar.
CCOO, UGT, CSI·F y Sindicato Libre valoramos positivamente este primer gesto serio del Gobierno hacia el conflicto de Correos, pero también dejamos claro que éste seguirá abierto hasta que se concreten los compromisos anunciados en empleo, pero también los pendientes en mejoras de salario, ultraactividad y derechos. En este sentido, hemos solicitado una reunión al Ministro de Hacienda instando a que se dé una salida satisfactoria a este conflicto laboral.
En este sentido, CCOO, UGT, CSI·F y Sindicato Libre mantendremos la movilización en junio y julio, con asambleas, concentraciones y manifestaciones provinciales y zonales, y acciones mediáticas que daremos a conocer en los próximos días; y si no hay ninguna respuesta satisfactoria por parte del Ministerio, SEPI y Correos, a partir de septiembre, la movilización incorporará un calendario hasta final de año con más paros y huelgas.
La implicación de los trabajadores/as en el proyecto postal debe ser compensada con mejoras en: empleo, salario, derechos, recogidas en el marco de un buen Convenio y Acuerdo General.