El Proyecto de Presupuestos de la Comunidad de Madrid para el año 2023 contempla una subida de algo más de 525 millones, de los cuales más de la mitad proceden de fondos de la Unión Europea a través del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia (MRR). El aumento presupuestario se destinará, fundamentalmente, al aumento de los salarios del profesorado de pública y concertada, infraestructuras, cheques para centros privados e investigación.
Respecto al aumento salarial de los docentes hay que indicar que ni siquiera nos coloca en la media española, pues estábamos situados los últimos y penúltimos en cuanto a retribuciones, según el cuerpo docente al que se perteneciera.
Las infraestructuras se afrontarán mayoritariamente con fondos de MRR, tanto los centros de nueva creación como las ampliaciones, renovaciones y mejoras, a los que se destinará un crédito de 45.435.274 euros, de los que 30.287.360 euros procederán del MRR, así como para digitalización de los centros, con una dotación de 49.125.000 euros, de los que 48.250.000 euros proceden del MRR.
En becas y ayudas, casi se duplica la partida, gracias al aumento de cheques escolares para centros privados, situándose por encima de 260 millones de euros. Eso sí, prevén una disminución de beneficiarios de precio reducido de comedor, pasando de 106.300 en 2022 a 101.000 en 2023, al igual que sucede con las rutas de transporte escolar, que pasan de 730 a 660. Es decir, disminuyen las ayudas a las rentas bajas y más vulnerables y al alumnado rural. A cambio, familias con rentas de cien mil euros podrán descontar parte del coste de su plaza escolar en centros privados.
Otra partida que disminuye es la de Viceconsejería de Organización Educativa, que engloba a la Inspección, disminuyendo en casi veinticuatro millones, y ello pese a que aumenta sus funciones y actuaciones.
El Gobierno Regional sigue teniendo problemas para saber el número de docentes de enseñanza pública que tiene. En el presente Proyecto de Presupuestos indica que para el curso 2023 se prevén 51.936 funcionarios docentes, el año pasado tenía previstos 51.182 ¿Dónde están los 61.000 que la Presidenta se empeña en defender? Tal vez no le han comunicado que los refuerzos COVID fueron despedidos.
Pero las partidas más preocupantes son, tal vez, las destinadas a compensación educativa y atención a la diversidad. Aquí no hay aumentos reseñables, salvo el que se produce en aulas de enlace, como consecuencia de la llegada de alumnado ucraniano, que pasan de 26 a 59 y la financiación europea de programas de refuerzo. No aumentan los centros de Educación Especial, ni los Equipos de Orientación en cualquiera de sus modalidades, ni el número de funcionarios docentes, ni el presupuesto, salvo el destinado a subida salarial que ya hemos mencionado.
Para la reducción de ratio en Educación Infantil de Segundo Ciclo prevén 219 docentes más, cuando el número de grupos se estima en 3.100. Y ello porque la reducción se produce sobre una cohorte de edad que ha sufrido una disminución importante de natalidad que permitiría, sin un aumento de financiación importante, acelerar el proceso de reducción de alumnos por grupo.
En la sesión parlamentaria dedicada al debate del Proyecto de Presupuestos en Educación, el Viceconsejero y los miembros de su Consejería dieron cifras disparatadas y en contradicción con los que recoge el mencionado Proyecto, como es el caso del aumento de 214 unidades de concertada, que aparecen como 127, o los 37 centros públicos nuevos construidos y que no existen.
Por otra parte, no importa cuánto se presupueste si luego no se ejecuta, como ha venido sucediendo con numerosas partidas durante toda la legislatura.
Por tanto, UGT sostiene que estos presupuestos no van a resolver el problema de financiación que la educación pública madrileña tiene pendiente, mantendrán el altísimo gasto familiar en enseñanza e incidirán en la privatización de la misma. Son presupuestos que ahondarán las diferencias entre alumnado y dejarán, una vez más, de lado a los más vulnerables.