LA RED DE OFICINAS DE LA COMUNIDAD DE MADRID ES VICTIMA DEL MODELO SERRANISTA, EN EL QUE LO UNICO QUE IMPORTA ES LA SUMISIÓN AL “LÍDER”
El modelo de gestión Serranista impuesto por el mal llamado “Plan estratégico”, avalado por las organizaciones firmantes el pasado 16 de diciembre (CSIF y Sindicato Libre), hace estragos en la red de oficinas de la Comunidad de Madrid desde hace meses. Esto es algo que no es nuevo, porque ya desde marzo de 2020 comenzó la imposición de muchas de las medidas que, de manera oculta, buscaban preparar el terreno para la implementación de ese Plan Estratégico que Serrano estaba negociando con el Sindicato Libre, CSIF, CGT, ELA y CIG. Las únicas organizaciones sindicales que nos negamos a participar en esa “mesa del desguace”, fuimos CCOO y UGT, denunciando que serviría para legitimar a Serrano el “haber negociado” su plan. Ahora las consecuencias las sufrimos todos, y los firmantes juegan al “yo no he sido”.
No solo hablamos de las nuevas formas de organización que generan el caos en la gestión, sino que profesionales de Correos con años de acreditada competencia y compromiso en el cumplimiento de los objetivos en sus puestos, ven cómo son perseguidos en una verdadera “caza de brujas”, dirigida a quien no se muestra sumiso y dispuesto para aplicar las medidas más duras para con la plantilla y con el cambio de modelo de negocio. Serrano no quiere que nadie en la dirección ejecutiva muestre el más mínimo titubeo o discuta sus órdenes.
Que esas órdenes sean solo ocurrencias, o que no sean las más adecuadas para garantizar el servicio postal y la viabilidad de Correos no importa. Lo que importa es que se vendan bien en prensa, como los aviones y el resto de proyectos ridículo faraónicos, en los que se gastan millones de euros que no tenemos, mientras se recortan las plantillas. A Serrano solo le importa su proyección política y mediática, y para conseguirla tiene que descabezar a toda el área, privándola de talento y capacidad de trabajo, ubicando en los puestos de responsabilidad a personas sumisas a sus planes. Advertimos a estos voluntariosos “adeptos” que Serrano no tendrá ningún miramiento tampoco con ellos cuando dejen de serles útiles, como ya le ha ocurrido a más de un profesional de esta casa que se las prometía muy felices.
Dentro de la red de oficinas se vienen registrado una serie de movimientos que vienen a demostrar que todo lo denunciado anteriormente es absolutamente cierto: Direcciones de oficinas trasladadas por “No cumplir el perfil”, en Oficinas que venían registrando una rentabilidad que en algunos casos ocupaban los puestos más altos en el “ranking” de la Comunidad. ¿De qué perfil estamos hablando? ¿Del proyecto que con tanto bombo y platillo quieren imponer? ¿O más bien estamos hablando de la más servil sumisión al desguace impuesto por la dirección?
Como ya denunciamos CCOO y UGT, el desprecio al talento y profesionalidad que ello conlleva está llevando a la red de oficinas hacia la inoperatividad, mientras la Dirección Territorial, bautizada como Área de Operaciones, oculta sus movimientos para evitar una respuesta sindical, puesto que sabe de antemano que las ordenes que debe cumplir van en contra de la empresa, del trabajo y del futuro de la misma.
CCOO y UGT no nos vamos a callar, y exigimos que se respeten los derechos del colectivo, y los defenderán utilizando los medios que sean necesarios, porque Serrano, el político metido a gestor postal, se irá más pronto que tarde, pero el daño que está haciendo su gestión puede ser irreversible