Las declaraciones de la Presidenta de la Comunidad, en el acto de apertura del curso académico, sobre la posibilidad de anticipar futuros inicios de curso al 1 de septiembre para mejorar la conciliación familiar es una mera manifestación populista, hueca de contenido, para quedar bien con las familias y distraer la atención de los verdaderos problemas de la educación madrileña.
La realidad educativa madrileña es que tenemos la menor inversión por alumnado de todo el Estado, que nuestra red pública es la menor y el gasto familiar en enseñanza el mayor del país. Sugerimos a la Consejería que aborde, de una vez, la bajada de ratios en todos los niveles, el aumento de profesorado, afronte la construcción de centros educativos de forma eficaz, la climatización de los centros y su desamiantado y modifique la política de becas para que éstas sirvan para paliar la desigualdad en la Comunidad Autónoma más desigual de toda España.
Pero, además, para UGT la conciliación se consigue mediante dos elementos esenciales: E primer lugar con más inversión pública (de los gobiernos y los ayuntamientos) en materia de conciliación, financiando y buscando espacios que faciliten a las familias la conciliación familiar y laboral, mediante la apertura gratuita de centros, con actividades culturales y deportivas en días no lectivos. Este tipo de actuaciones se vienen realizando en otros países del entorno, por ejemplo en Francia, para dar cobertura a las fechas en que el alumnado no tiene asistencia a clase, actuación en la que también participan los ayuntamientos.
En segundo lugar con políticas empresariales comprometidas con la conciliación. Por lo que resulta sorprendente que siendo Madrid la locomotora del empleo de toda España, según el criterio del gobierno regional, no lidere también las políticas de conciliación que, sin duda, facilitaría la incorporación de un amplio sector de nuestra sociedad al mundo laboral, especialmente las mujeres, y mejoraría las condiciones sociales para animar a los jóvenes a aumentar la natalidad, que tan preocupada tiene a nuestra Presidenta.
Queremos recordar a la Consejería que el actual calendario escolar ya se encuentra en el límite legal de horas lectivas del convenio de enseñanza concertada, que es de ámbito estatal, que como en múltiples ocasiones han hecho constar los titulares de los centros privados concertados y, por tanto, no podría ampliarse. Y que no ha sido capaz de iniciar el curso con la totalidad de las plantillas completas, ya que aún no se ha procedido a la contratación de todo el profesorado necesario.
Pero más allá de estas consideraciones, el factor esencial para UGT es la conveniencia educativa de dicha medida. Animamos a la Consejería a abrir un verdadero debate con los sindicatos de enseñanza y la comunidad educativa sobre la oportunidad “educativa” de anticipar el inicio de curso, porque es de educación, su mejora y su calidad de lo que tenemos que hablar. La conciliación es un factor ajeno a la enseñanza y al profesorado, ya que no entra dentro de sus funciones, aunque “de facto” se utilice para ello.