La LOMLOE estableció 5 modalidades de Bachillerato frente a las 3 existentes. El de Artes se subdividió en dos, pero se creó uno nuevo, el llamado Bachillerato General, creado para aquel alumnado que aún no tuviera decidido hacia donde quería encaminar sus estudios posteriores y que permite al futuro alumnado de determinados Grados universitarios poder acceder en igualdad de condiciones, no priorizando a aquellos que procedan de una modalidad sobre otros como, por ejemplo, Psicología que desde hace unos años se encontraba vinculado al Bachillerato de Ciencias frente al de Humanidades y Ciencias Sociales.
Es obvio que se trata de una formación más generalista y flexible, que facilita al alumnado diseñar mejor un itinerario propio, como también lo es que su ordenación educativa llega con retraso y hace más difícil su implantación para el próximo curso. No obstante, la Consejería de Educación madrileña solo ha ofertado esta modalidad en 5 de los 289 centros públicos madrileños, algo que vuelve a escenificar su constante enfrentamiento con el Estado en materia educativa. Si se oferta es, obviamente, porque se puede y si se hace en tan pocos centros (1 por cada una de las Direcciones de Área Territorial) es porque no se quiere hacer.
En relación con los centros privados (con o sin concierto) no se ha detectado ninguno que haya ofertado dicha modalidad. Lo que si se ha podido comprobar es que solo una minoría, que no llega al 10%, oferta el Bachillerato LOMLOE, lo que demuestra una actitud manifiestamente contraria a dicha ley.
UGT manifiesta su decisión de vigilar por el cumplimiento de las leyes y recuerda que quienes no estén de acuerdo con las mismas tienen mecanismos legales para cambiarlas, mientras tanto hay que cumplirlas.